domingo, 17 de agosto de 2014

Verde nuclear, fresco y ácido como la muerte

  Resplandeciente y bella la luna verde, una luna de zombies y personas nocturnas que buscan algo en sus vidas, una chispa, una señal, un momento, la luna está sola sin  el amor de su señor sol, que ruge como machista diplomático  con su presencia cálida y bochornosa,  por la ira que lleva dentro, al saber que su amada luna lo engaña con el universo y que la distancia los separa y los une para reconciliarlos cuando se le da la gana; la distancia y el destino son también dos amantes infieles, la distancia  tiene sexo con los sentimientos , luego los desecha y los deja preñados de amarguras y tristezas, el destino sospecha de la infidelidades de la distancia pero no puede decir nada por que su conciencia está tan sucia como sus sábanas donde queda registró y huella de sus amoríos con la suerte y la fortuna, como resultado nacen los sueños y quedan huérfanos por que sus padres son unos hijueputas, unos perdedores, por esta razón aquellos pequeños sueños se ven obligados a vagar por la vida, en busca de personas que los merezcan, personas reales, consientes de lo que son, y de lo que quieren, personas que sufren y tienen corazón de oro, miedo, excitación e incertidumbre...